Telediarios, ¡¿dónde estáis?!. ¡Salid con los avances en alto!
¿No nos hemos dado cuenta, de que hoy día nos acribillan con una serie de mini-publirreportajes, que es una antítesis coponiana, hablando en blasfemo?. Un telediario solía ser una selecta selección -valga el epíteto como hipérbole redundante, por decirte pedante- de las noticias. Candentes, novedosas, del día, recientes, calentitas (y buñuelas). Pero los hemos perdido. Ahora 2 de cada 3 temas tratados son reportajitos, que si bien no te los ponen hoy, te los podrían poner perfectamente antes de antié, o pasado mañana por la tarde noche según avanza el día. Y nadie diría: "niño, vaya pasote... ¡Esto de los hombres que viven de la miel sobre hojuelas es una noticia de ayer! se han colado". No, no, no. Nadie notaría nada. Y yo menos, que estoy en babia, capital de Salivia.
Porque otra cosa querida mariposa, es que no sabemos exactamente cuál es la intención que tienen los gurús o gurúes (si es que existen) que diseñan los telerreportajitos. Ni exactamente, ni de lejos, vaya con las gomibayas. Intereses económicos quizá, familiares, intereses morales.... jajaja. Es decir, que de diario, nada. Sí. Ni la frecuencia es diaria (tenemos 3 al día al menos en cada cadena), así que ... por favor, entonen conmigo, queridos personajes de a diario, un "descanse en paz, telediario que una vez te vi pasar". Amén.
((he coloreado las palabras sin ningún sentido de la vida. Quilosipassss))
19 de abril de 2005
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