12 de mayo de 2005

Esa parte que nos une

Hola, a continuación, encontraréis la reproducción de un email encontrado casi por error en mi bandeja de salida, allá por el mes de febrero, y que viene a ser una opinión (como tantas otras) a modo de cuentecillo-epístola sobre una A mayúscula. Perdonad los sobrenombres.

-----Mensaje original-----
De: carlitos reina [mailto:
vistalova@gmail.com]
Enviado el: martes 8 de febrero de 2005 11:20
Para: Luis Serrano; Francisco Serrano; Alba Ortiz; Pepe Vega; José Rodríguez; Antonio Candelas; María Ausonia; Jesús Real; Elena de los Santos; John Custodio; Fernando Rodríguez de Quesada
Asunto: RV:un cuento largo y pesao :D

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Querido Roberto,
soy Felipe ¡por fin lo he conseguido! ufff! ha sido bastante duro, por no decir tremendamente duro. Pero al final las cosas salen, es verdad lo que me decías en tu último email. Bueno, te cuento. Como sabes los progresos en materia de genética están a la orden del día, y lo que es más, están en los medios de comunicación casi a diario. Pues te comunico que ya he recibido por correo ordinario,certificado, ¡mi código genético completo! Sí, tal como lo oyes. Estoy super entusiasmado, tío. Mi ADN detallado. UAUUUU. Te lo mando adjunto en este correo. También te mando un subrayador amarillo fluorescente. Ahora te ruego que le eches un vistazo, y que uses el rotulador que te he mandado. Pero cuidado al leerlo, porque vas a encontrar cosas que no te van a gustar nada, pero nada nada. No me han gustado ni a mí... Vas a encontrar tendencias equivocadas, malas costumbres (yo pensaba que era eso,¡costumbres! :D), malos gestos, feas palabras, algunos recelos, muchos defectos, etc. Por eso te pido paciencia, para que llegues hasta el final. Creo que como buen amigo que eres, me harás el favor de subrayar aquello que consideres importante. Lo que tú quieras. Si lees atento, seguro que encuentras esa parte que nos une. ¡Se ha quedado grabada en mi ADN! Es de película, pero ya ves... Bueno, pues eso, que si eres tan amable, reenvíame el archivo con tus marcas, con lo que hayas subrayado. Estaré encantado de leerlo.
Me han dicho los descubridores estos del genoma humano, que el archivo que me han mandado es mágico. Sí. Por ejemplo, hay una parte que es "cómo leeré yo mi propio ADN", ... cómo lo interpretaré... Es algo complicado... Por lo visto no es lo mismo que lo lea yo a que lo lea otro. Por eso te pido que me subrayes las palabras que sean más importantes para tí. Ah! me dicen que hay una parte (esta es mi favorita) que es mágica total. El capítulo se llama "personas que me quieren". Por lo visto cuando uno lo lee, aparecen unos nombres, pero cuando lo lee otra persona, puede que cambien esos nombres. ¿Me puedes decir además (cuando me escribas) si has leido tu nombre en la lista? También me han dicho que puedo sobreescribir un capítulo, si veo que no me convence. El capítulo se llama "Personas a las que quiero". Pero las instrucciones son un poco raras. Dicen las instrucciones, que lo que se le permite al usuario, es independizar el capítulo "Personas a las que quiero" del capítulo "personas que me quieren". Pero dicen algo que todavía no he entendido muy bien (en ello estoy). Dicen que podemos escribir todos los nombres que queramos en "personas que quiero", independientemente de que estén o no en "personas que me quieren". Raro, ¿verdad? Y añaden, que si uno es perezoso, puede poner la opción más "cara" y por defecto: todos. Es un lío en verdad. Aunque no lo entiendo bien, yo he elegido esta. Por último, quería ofrecerte la posibilidad de hacer lo mismo con tu ADN, si quieres. Así, si me lo dejas ver, si me lo muestras, señalaré para tí aquellas palabras que sean importantes para mí. ...Y gastaré miles de estuches de rotuladores subrayando una y otra vez, compulsivamente, una sola palabra, la primera vez que la encuentre. ...Un abrazo genético, y hasta pronto!!

PD: Ah! y no me contestes a este correo. Ya te escribiré yo otro pronto, si quieres.

felipitoreinolds.
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... y en efecto, nadie contestó.
Adjunto al correo, aparece un archivo llamado ADNmarcadoPORmi.doc, en el que se lee (señala con el ratón el hueco amarillo):
concluían sayo de velarte, calzas de velludo para las fiestas, con sus pantuflos de lo mesmo, y los días de entresemana se honraba con su vellorí de lo más fino. Tenía en su casa una ama que pasaba de los cuarenta, y una sobrina que no llegaba a los veinte, y un mozo de campo y plaza, que así ensillaba el rocín como tomaba la podadera. Frisaba la edad de nuestro hidalgo con los cincuenta años; era de complexión recia, seco de carnes, enjuto de rostro, gran madrugador y amigo de la caza. Quieren decir que tenía el sobrenombre de Quijada, o Quesada, que en esto hay alguna diferencia en los autores que deste caso escriben; aunque, por conjeturas verosímiles, se deja entender que se llamaba Quejana. Pero esto importa poco a nuestro cuento; basta que en la narración dél no se salga un punto de la verdad.

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